SOBRAS DE LA NOCHEVIEJA
Entre los manjares que sobraron de la cena de ayer, estos dos tristes langostinos.
Preparados para ser comidos en el 2012, han tenido que esperar hasta el año siguiente para acabar en nuestros estómagos. Qué paradoja…
El primer día del año siempre es un día raro y un poco inútil.
No sé por qué decidí que las sobras de la cena de ayer serían un buen dibujo para hoy.
La respuesta correcta es la B. (Ahora no tengo gato)
en mi caso habría dos opciones,
a)…que mi gato los hubiera robado y trapiñado (no perdona a los langostinos)
b)…a la plancha y con una cervecita, para pasar el resacón de nochevieja